RE/CUERDO

Una instalación y actuación en dos salas.
La bodega. La oscuridad húmeda no es sólo el lugar donde las cosas esperan para nacer: también vuelven a ella después de vivir tensadas de sol. Fermentan, se contagian, bullen: alimentan los rápidos movimientos de los ojos dormidos y de los cuerpos que cruzan la calle. 
Debajo de todo está la tierra: la que espera paciente que se derrumbe la ciudad para hacer sitio a la hierba, y también la otra, que da melocotones y trigo. Yo he nacido cuando esta se iba y me he ido.

El pasillo. Es verdad que C. está sentado en un pasillo blanco. De alguna manera este blanco representa - como fusión de todos los colores - la actualidad hecha de olvido en que vivimos ahora. Pero C. no está demasiado triste, ni se siente demasiado fuera de lugar, porque ha aprendido a percibir lo que hormiguea en la bidimensionalidad de la pantalla de la tele y de la hoja del periódico, o lo que tiene un beso de general. Está activo, muy activo: no ha renunciado a poner un poco de orden en los hechos, sobretodo en los que de él dependen. Recuerda, porque recordar es inventarse y estar cuerdo. También sabe que algunos trozos de su memoria son de otros.

Presentado en la Galeria l'Angelot (Barcelona).